Una madre galesa vio un mensaje de un contacto en común con su hija que anunciaba el fallecimiento de ésta. La Policía no le notificó el fallecimiento hasta pasadas más de tres horas
LVL
Madrid.- Las redes sociales se han convertido en el medio más rápido para difundir noticias, pero Cheryl Jones,
una ciudadana galesa de 49 años, nunca pudo imaginar que comprobaría de
esta terrible forma la inmediatez de las nuevas tecnologías: se enteró
de la muerte de su hija por Facebook, según publican varios diarios británicos.
Esta madre tuvo que mirar más de una vez la pantalla de su ordenador para creer lo que estaba viendo. Y es que un contacto que tenía en común con su hija Karla anunciaba en su muro el fallecimiento de ésta. Cheryl Jones, descompuesta al ver el mensaje, llamó a su hija por teléfono, pero quien lo cogió fue un agente de Policía que, no obstante, no confirmó la fatal noticia. Sólo le dijo que un agente se desplazaría hasta su domicilio.
No fue hasta pasadas más de tres horas de esa llamada cuando otro policía se personó en su casa para comunicar a Cheryl Jones el fallecimiento de Karla, de 30 años y con problemas cardiacos. La madre ha interpuesto ahora una demanda por este injustificable retraso de comunicación que la Policía explica asegurando que no encontraban la vivienda.
“Todavía no sé por qué mi hija murió, estoy esperando para averiguarlo. Lo que me hace estar muy mal es la forma atroz en que me trató la policía. Nunca olvidaré la manera de enterarme de la muerte de mi bella hija”, señala esta madre.
> En la imagen, Cheryl Jones y su hija Karla.
Esta madre tuvo que mirar más de una vez la pantalla de su ordenador para creer lo que estaba viendo. Y es que un contacto que tenía en común con su hija Karla anunciaba en su muro el fallecimiento de ésta. Cheryl Jones, descompuesta al ver el mensaje, llamó a su hija por teléfono, pero quien lo cogió fue un agente de Policía que, no obstante, no confirmó la fatal noticia. Sólo le dijo que un agente se desplazaría hasta su domicilio.
No fue hasta pasadas más de tres horas de esa llamada cuando otro policía se personó en su casa para comunicar a Cheryl Jones el fallecimiento de Karla, de 30 años y con problemas cardiacos. La madre ha interpuesto ahora una demanda por este injustificable retraso de comunicación que la Policía explica asegurando que no encontraban la vivienda.
“Todavía no sé por qué mi hija murió, estoy esperando para averiguarlo. Lo que me hace estar muy mal es la forma atroz en que me trató la policía. Nunca olvidaré la manera de enterarme de la muerte de mi bella hija”, señala esta madre.
> En la imagen, Cheryl Jones y su hija Karla.