Andalucía: entre la continuidad del pesebre y el cambio difícil
El candidato socialista a presidir la Junta de Andalucía, José Antonio
Griñán, sólo ha coincidido con Alfredo Pérez Rubalcaba el último día de
campaña electoral
Héctor Salazar/Fotos: GTres viernes, 23 de marzo de 2012, 21:26 Madrid.- Andalucía vive este domingo una cita trascendental con las urnas. Los andaluces eligen entre la continuidad del pesebre o el cambio difícil. Lo primero, protagonizado por el Partido Socialista Obrero Español, que durante los últimos 30 años de gobierno en la Junta ha desterrado la cultura del esfuerzo para instalarse en las ayudas procedentes de los gobierno de España de turno y de los fondos europeos. Las ERE fraudulentos que también han tenido al candidato socialista, José Antonio Griñán, como protagonista, han servido para dar imagen a un estilo de gobierno, el de los socialistas, que ha cologado a Andalucía a la cola de España en ámbitos como el desempleo y el fracaso escolar. Más de 6,4 millones de andaluces acuden este domingo a los colegios electorales. 368.103 lo hacen por primera vez. Según establece el Estatuto de Autonomía de Andalucía, los electores eligen a los 109 diputados que conforman la cámara autonómica. Los diputados por cada circunscripción (provincia) son: 18 por Sevilla, 17 por Málaga, 15 por Cádiz, 13 por Granada, 12 por Córdoba, también 12 elegirá Almería, y 11 diputados aportarán Huelva y Jaén. En los últimos comicios autonómicos, celebrados el 9 de marzo del año 2008, el PSOE revalidó la mayoría absoluta que cosechó cuatro años antes: 56 escaños por 47 del Partido Popular, ya con Javier Arenas como candidato, y 6 de Izquierda Unida. El Partido Andalucista no logró ningún acta de diputado. Los datos, demoledores, no concuerdan con lo gritado por los candidatos socialistas en la campaña electoral. Andalucía tiene una tasa de fracaso escolar del 33 por ciento, una tasa de paro del 31 por ciento - más de 400.000 hogares andaluces no cuentan con ningún ingreso - y un décicit presupuestario del 3,2 por ciento, el doble de lo previsto. Todas las encuestas coinciden en que el PSOE perderá las elecciones en Andalucía. En lo que se muestran dispares es si el Partido Popular, encabezado por Javier Arenas, logrará una mayoría absoluta que haga que los socialistas pierdan el poder que han ostentado los últimos 30 años. Sólo la mayoría absoluta permitirá a Arenas ser presidente de la Junta de Andalucía y teñir más aún de azul el mapa de España. PSOE e Izquierda Unida pactarán, tal y como han anunciado ambas formaciones, para evitar que los populares puedan gobernar a pesar de que ganen las elecciones. Los estudios realizados hasta la fecha auguran un vuelco en todas las provincias de Andalucía. Incluso en Sevilla, tradicional bastión socialista, el Partido Popular podría superar al PSOE, a pesar de que en los anteriores comicios, en el año 2008, los socialistas sacaron a los populares 23 puntos de diferencia. Unión Progreso y Democracia (UPyD) puede ser otro de los protagonistas de las elecciones. A pesar de que se presentaron en los anteriores comicios autonómicos, es la primera vez que la formación liderada por Rosa Díez tiene opciones de entrar en el Parlamento Andaluz. Los sondeos conceden a UPyD dos escaños, uno por la provincia de Sevilla, y otro por la de Málaga. El candidato de UPyD a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Martín de la Herrán, solicitó el voto de aquellos andaluces que desean "transparencia real" en las instituciones y una Administración autonómica "sin corruptos". En caso de la entrada de la formación magenta, quedaría fuera el Partido Andalucista. José Antonio Griñán, el candidato del Partido Socialista Obrero Español a seguir presidiendo la Junta de Andalucía, no ha querido coincidir con el secretario general socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, durante la campaña electoral andaluza, excepto un día, el último. Antes que presidente y secretario general del PSOE se hayan encontrado, Griñán lanzó un dardo a Rubalcaba, asegurando que no dimitirá si su formación cosecha un descalabro en las urnas. José Antonio Griñán se aferra al sillón de mando del PSOE de Andalucía. Su ejemplo, Alfredo Pérez Rubalcaba, que no dudo en optar, y lo consiguió, a la secretaría general socialista pese a protagonizar el mayor descalabro electoral del PSOE desde que en España se vive en democracia: "No podemos medir las responsabilidades orgánicas con el éxito electoral, porque pocos responsables orgánicos han tenido éxito electoral". Según Griñán, si se utilizase el baremo de dimitir tras un fracaso electoral, "el PSOE hoy en día no tendría Ejecutiva". Alfredo Pérez Rubalcaba, Griñán y Felipe González sólo han estado un día juntos. El último. Rubalcaba protagonizó junto al candidato del PSOE dos actos, en Sevilla y Córdoba respectivamente. En ambos, la misma tónica: evitar nombrar a José Antonio Griñán y centrar su discurso en los 30 años que el PSOE ha gobernado en Andalucía, comparando al Partido Popular con los gobernantes de la dictadura franquista. Andalucía: o continuidad de la cultura del pesebre, o el cambio difícil. > En la imagen, en primer plano, de izquierda a derecha: Elena Valenciano (vicesecretaria general del PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba (secretario general) y José Antonio Griñán (presidente en funciones y candidato de la Junta de Andalucía). A la derecha, Javier Arenas, candidato del Partido Popular a presidir la Junta de Andalucía, junto a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno y líder de los populares.